POMBERO

de Marina Closs 

(editorial Páginas de Espuma)

Hace tiempo tenía pendiente leer este libro pero, la verdad, venía de leer varios otros libros de cuentos (muy buenos todos, recomendados) y no me daban tantas ganas de arrancar con uno más. 

Pero oh sorpresa. ¡No es uno más! Para nada es uno más. A mí me partió la cabeza. Desde el principio se nota que no es igual. El libro fue finalista del Premio Ribera del Duero, en España, en 2022. (Y tanto me gustó este que me hizo preguntarme quién se había sacado el premio de las manos: fue para la escritora boliviana Liliana Colanzi por "Ustedes brillan en lo oscuro", a quien no leí y ya está en mi lista de pendientes.)

Marina Closs es muy joven y nació en la provincia de Misiones (al noreste de la Argentina, provincia que comparte frontera con Brasil y Paraguay). Su origen no es dato insignificante, el aire misionero se respira en sus páginas. 

El primer cuento es el que le da nombre al libro, "Pombero", y si bien es excelente y es una gran puerta de entrada, a mí me resultó quizás un poco más confuso que el resto, me costó un poco más seguir la trama del relato. Sin embargo, después me di cuenta, esto es exclusiva responsabilidad mía porque no estaba familiarizada con la leyenda del Pombero, o Pomberito como le dicen. Investigué un poquito y volví a repasar algunas páginas del cuento, y todo lo vi con mayor claridad. Por eso, eso una buena idea que antes de leer este cuento, si todavía queda alguien que no conozca la leyenda, averigüe un poquito. (Como referencia desgraciada, tiempo después de leer el libro comprobé la vigencia de esta leyenda, en algunas poblaciones de Argentina, cuando la abuela de Loan mencionó que el Pomberito se lo había llevado).

Para cuando llegué al segundo cuento y conocí a Dunka, Marina Closs ya me tuvo rendida a sus pies. Sigue "Jabalí", en el que el relato se expande por la historia de los pueblos originarios del nordeste argentino, sin protagonistas claros más que el pueblo y su devenir tras la conquista. A continuación, con redoblantes, entran en escena María das Luzes, Rosita, Suzumushi y Marioka, que se unen a Dunka en ese aire ingenuo, fresco, y a la vez fuerte, esa fortaleza que viene de la libertad con que saben vivir; cada una de ellas se regodea en su identidad propia, inventada o heredada, con pasión por la vida y una casi sabiduría innata en su no saber. A todas las quise. 

Para mí, este libro de cuentos pasó a la lista de los imperdibles y Marina Closs entró en la lista de las autoras que necesito seguir explorando. Seguro no va a ser el último libro que leo de ella y las expectativas son altas. Muero por saber cómo resuelve una novela, por ejemplo. Cuando lo haga, les cuento (tengo "Tres truenos" como otro pendiente).